Unas notas introductorias
Unas cuantas advertencias que pueden ahorrarte unos minutos de lectura:
- No encontrarás en este post frases tipo «la educación diferenciada es mejor que la mixta» o «la escuela privada concertada es mejor que la pública». Simplemente no las encontrararás aquí porque ni me las creo ni las comparto.
- Creo que la educación sexista es nausebunda. Denigra a hombres y mujeres porque condicionan y limitan el itinerario formativo según su género. Lo mismo si el criterio fuera la raza.
- Este post nace de la necesidad de a) explicar porque elegimos los colegios que elegimos y b) corregir el empeño de determinados grupos de opinión que insiste en hacer sinónimas palabras que no lo son.
La semántica sí importa para poder debatir
Recientemente el Tribunal Supremo consideró incompatible que, según la ley actual (LOE), exista conciertos con escuelas de educación diferenciada.
Sin embargo determinados medios que, tradicionalmente, son contarios a la escuela concertada de educación diferenciada, sugieren que se trata de un varapalo del Tribunal Supremo a escuelas sexistas subvencionadas con dinero público.
Curiosamente medios como LaInformación.com sí reprodujo literalmente el asunto «El Tribunal Supremo rechaza los conciertos a colegios de educación diferenciada por sexo«.
Hay algo que no cuadra entre la sentencia y lo que desde El País se está diciendo: La sentencia habla de educación diferenciada y conciertos, pero El Pais utiliza en cambio segregación sexista y subvención.
¿Son sinónimas estas palabras? A primera vista podrían parecerlo. Pero el lector ya se habrá dado cuenta que esa manipulación semántica esconde una línea editorial un poco opaca: desprestigiar la educación diferenciada llevándola a la memoria colectiva de la educación franquista.
Podría extenderme páginas y páginas explicando la importancia de ser rigurosos semánticamente -y mucho más cuando lo que anda en juego es la educación de nuestros hijos- pero a estas alturas confío en que el heroico lector de este post sabrá que «segregacionismo» es sinónimo de «apartheid» y que «diferenciar» es sinónimo de «dar a cada uno lo que necesita»
Dicho de otro modo. Si a uno de mis hijos no le dejo jugar a la Play Station porque está afectando a sus estudios, pero en cambio a otro hijo sí se lo permito porque considero que sabe organizarse mejor, no los estoy segregando ni coartando su libertad. Simplemente, estoy, mediante la diferenciación de trato, intentando que sean mejores en sus tareas.
Detractores y defensores
He seguido con mucho interés los comentarios en Twitter de muchas personas que tomaban partido sobre el asunto. También he seguido el enfoque de noticias y las argumentaciones de líderes de opinión.
Los detractores se emboscaban en frases como: vuelve el franquismo opusdeista, la Iglesia queire controlarlo todo, son escuelas de ricos donde las niñas van a la cocina y los hijos al cortijo, etc.
De hecho, una de las cosas que más me han llamado la atención en este debate es la ausencia de argumentos, estudios y razonamientos de aquellos que consideran que la Educación Diferenciada es una propuesta educativa abyecta.
Sólo algunos, y son muy pocos la verdad, se sacuden la pátina histórico-política para sugerir que la evolución emocional de los niños y niñas podrían ser incompletas en la educación diferenciada. Y otros pocos acuden a un argumento agnóstico: no está demostrado que la educación diferenciada sea buena o mejor que la mixta (y tampoco mala o peor, añado yo)
Pero entre todos los detractores no he sido capaz de encontrar ninguno que ofrezca enlaces que remitan a estudios más o menos completos o a argumentos de peso elaborados por educadores de presitigio. Como mucho se apoyan en la sentencia del Tribunal Supremo.
Llegados a este punto es necesario recordar la Convención de la UNESCO relativa a la Lucha contra las Discriminaciones en la Enseñanza donde dice:
«no serán consideradas como constitutivas de discriminación en el sentido del artículo 1 de la presente Convención: a. La creación o el mantenimiento de sistemas o establecimientos de enseñanza separados para los alumnos de sexo masculino y para los de sexo femenino, siempre que esos sistemas o establecimientos ofrezcan facilidades equivalentes de acceso a la enseñanza, dispongan de un personal docente igualmente calificado, así como de locales escolares y de un equipo de igual calidad y permitan seguir los mismos programas de estudio o programas equivalentes»
Pero lo dicho, ningún argumento de peso. Sólo mensajes que recuerdan a valores negativos de épocas anteriores: castigos corporales, bromuro, Sudáfrica, etc.
Lo que más me ha llamado la atención es entre los detractores de la educación diferenciada la nula visibilidad que le han dado a Mariano Fernández Enguita, probablemente uno de los estudiosos de nuestro sistema educativo con más prestigio y que, en esto estaremos todos de acuerdo, no es sospechoso de ser conservador.
Pues bien, Fernández Enguita plantea luces y sombras en todo sistema educativo ya sea mixto o diferenciada, pero asegura que la diferenciada no es mala per se y que puede aportar cosas valiosas a la formación de los chavales.
Por otra parte, en los argumentos de los que defienden el modelo de educación diferenciada he encontrado de todo. Pero me ha sorprendido que ha sido en este grupo donde más información científica he encontrado. E incluso escarbando más, he encontrado argumentos de educadores y estudiosos abiertamente progresistas y de izquierdas que ponen en duda las supuestas maldades de la educación diferenciada.
USA, UK…
Me preocupa mucho que haya gente que, por desinformación, crea que la educación diferenciada es cosa del fantanismo religioso en determinadas dictaduras. Por esta razón me gustaría realizar una visión rápida a unos cuantos países que son muy parecidos a España en cuanto a desarrollo de sólidos valores democráticos:
- En los Estados Unidos Hillary Clinton -cuya actividad política no se puede definir precisamente como conservadora o derechista- propone que la educación diferenciada lejos de ser un mal sistema, es un modelo que puede ayudar a la mejora formativa de chicas y chicos de determinadas zonas. De hecho en USA ya existen casi 400 escuelas públicas de educación diferenciada.
- En Inglaterra el 25% de las escuelas públicas son diferenciadas.
- La lista anual de las 500 mejores escuelas en Inglaterra muestra que en las escuelas públicas, excepto un año, más del 70% de las TOP TEN eran escuelas diferenciadas.
- En los Länder alemanes de Berlín y Renania del Norte, por iniciativa de los socialistas y de los «verdes», se iniciaron en 1998 clases diferenciadas en algunas asignaturas.
La raíz del debate en España.
¿Y en España? En España este debate está tremendamente politizado porque subyace la muy criticable experiencia educativa de los 40 años de dictadura franquista.
Sin embargo, han pasado casi los mismo años desde la muerte del dictador y ahí seguimos encastrados en el mismo debate: la educación diferenciada es una perversión propia de épocas pasadas dominada por oscuros poderes religiosos.
Evidentemente, mientras el debate siga estos derroteros poco o nada puede hacerse para encontrar puntos comunes sobre los que debatir: será un debate muerto de inicio por prejuicios apolillados.
Nuestra experiencia personal
Llegados a este punto nos gustaría compartir nuestra experiencia personal como padres.
Llevamos a nuestros hijas e hijos a escuelas de educación diferenciada no porque el modelo mixto nos parezca malo. Al contrario. Es un modelo tan lícito y legítimo como el de la diferenciada, pero que no se ajusta a lo que nosotros estamos buscando. Es más, el modelo mixto es totalmente necesario para aquellos padres que quieran optar por esa opción.
He estudiado 12 años en un colegio privado de educación diferenciada situado en una de las zonas más conflictivas de Barcelona y que durante los años años 80 fue un auténtico polvorín. Mi recuerdo de esos años son buenos. Muy buenos. Desconozco como me hubiera ido en una escuela mixta y por ello no cometeré la temeridad de hacer un ejercicio de ciencia ficción. Sé dónde estudié y sé lo bien que me fue allí. Lo demás son conjeturas estériles.
Pero cuando llegó el momento de llevar a nuestros hijos al colegio buscamos todas las opciones posibles. Y en nuestro caso nos guiamos por el criterio de conocer la opinión de los padres y comprobar de primera mano el resultado en sus hijos. Daba igual que fueran escuelas públicas, privadas, concertadas, laicas, de inspiración cristiana. Queríamos conocer experiencias y cotejarlas con lo que nosotros estábamos buscando.
Después de ver, comentar y evaluar pros y contras optamos por dos colegios muy concretos: dos colegios de educación diferenciada con nombres y apellidos que, según NUESTRO criterio, los valores de «esfuerzo», «laboriosidad», «orden», «compromiso», «amor a la verdad» implicaran desde el bedel de la puerta hasta el director pasando por todos y cada uno de los profesores.
Seguramente todos esos valores pueden encontrarse en una escuela pública mixta. Seguramente. Pero ahí está el tema: quienes elegimos fuimos nosotros porque nos dio la real gana.
¿Qué está en peligro?
Aquí es donde me gustaría centrar la conclusión de este post: el debate no va de segregación -que no existe- ni de subvenciones o conciertos. El debate va de que la libertad de elección de padres y madres del modelo educativo que queremos para nuestros hijos está en peligro.
Creo que nadie discute que la escuela privada concertada supone un ahorro económico enorme al estado (de ahí el concierto, que no subvención por cierto) Y parece claro que la educación diferenciada no es «per se» un modelo perverso. Entonces ¿por qué se limita la libertad de los padres a escoger este modelo de concertada diferenciada?
Si la educación diferenciada y las escuelas concertadas es una realidad ajustada a la ley ¿éstas no pueden sumarse? ¿Existe algún indicio de injusticia objetiva?
Mientras la masa crea que la educación diferenciada es algo tan espantoso como la segregación racial, y que ésta siendo financiada con subvenciones de dinero público, no habrá debate posible. Las cartas estarán siempre marcadas por una falsedad manifiesta.
Conclusiones: Sexismo, compromiso y sociedad
Nuestra experiencia como padres es sólo eso: nuestra experiencia; pero tras ver la evolución de nuestros hijos podemos afirmar estas cuatro cosas:
- No podemos afirmar que la formación académica y personal de nuestros hijos hubiera sido mejor o peor en la pública mixta.
- Sí podemos afirmar que los resultados que estamos obteniendo se acercan a lo que estábamos buscando.
- Creo, y de ello estoy totalmente convencido, que la sociedad cuando incorpore a nuestros hijos e hijas laboral, social, económica y políticamente lo hará encantada: los resultados que estamos obteniendo están siendo MUY satisfactorios.
- Si hubiéramos detectado el más mínimo trato sexista en la educación que han recibido nuestros hijos en estos colegios no lo hubiéramos dudado ni un segundo: los hubiéramos sacado de allí.
Ante esto surge evidentemente la pregunta del millón:
«¿Estás diciendo que esos resultados de los que os sentís tan orgullosos son atribuibles exclusivamente a la educación diferenciada?»
Y la respuesta es
«No creo que sean atribuibles en exclusiva. Pero sí sé que la educación diferenciada forma parte de una ecuación (familia + escuela + entorno) en la que no puede fallar ningún valor. Si falla uno, el resultado final se pone en peligro. Ergo, si estamos contentos con los resultados será que nos habrá ido bien la educación diferenciada ¿no?»
agosto 23, 2012 a las 10:42 am
Todo debate medianamente serio actual queda superficializado por titulares y demasiadas veces por lo que hizo Franco al respecto.
Como compañero en centros de ese tipo comparto mucho de lo que indicas, pero debo decir que seguro que alguna marca negativa nos deja, pero que en mi caso personal creo superada por las positivas.
Y para no extenderme más y extrapolando, si seguimos en la línea de la discriminación, miedo me da ver como van a ir los próximos JJ.OO. sin segregación sexual.
Un abrazo desde la zona conflictiva polvorín de los años 80…
agosto 23, 2012 a las 1:07 pm
Por supuesto que todo modelo tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. Esa es la gracia: que de la imperfección se puedan construir cosas positivas. Creo mucho en la rectitud de intenciones: en la voluntad de hacer las cosas bien a pesar de las limitaciones propias del hombre. Me consta que en ese cole «polvorín» se intentaban hacerlas bien… aunque siempre hubiera algunos que -vaya a usted a saber por que motivo- eran unos auténticos cabestros…
Un abrazo del Prat power para el L’HPower ;-)))
P.S.: Fíjate lo bien parado que salí de allí que aún sigo siendo del RCDE XDDDDD
agosto 23, 2012 a las 12:32 pm
Gracias por la reflexión. Muy interesante
agosto 23, 2012 a las 1:52 pm
Todo lo que dices está muy bien, y estoy de acuerdo en todo. Pero no se está discutiendo si la educación diferenciada es mejor o peor, ni la libertad de quien quiera llevar allí a sus hijos…
Se está discutiendo el concierto, hablando en plata: la subvención, a aquellos colegios que proponen una educación diferenciada. Es decir, si quieres llevar a tus hijos a un colegio así, págalo tú, no todo el resto de ciudadanos.
Todo esto enmascarado por una persecución de los progresistas porque la mayoría de esos colegios son de la Obra. Y dado el país en el que vivimos…
agosto 24, 2012 a las 9:23 am
Si la diferenciada no es ilegal… si los colegios privados puede concertarse (ahorran un montón de pasta al estado) entonces ¿por qué no es posible que exista diferenciada concertada?
Fíjate en Inglaterra donde el 25% de la pública es diferenciada. Es decir, financiada por el gobierno.
El hecho de que esos colegios en España sean de la Obra es parte de una agenda oculta que me preocupa. Probablemente, sino esos colegios no fueran de inspiración cristiana o directamente del Opus seguramente no habría tanto lío. Eso me parece ciertamente grave… Y es una verdadera pena que no existan colegios diferenciados de inspiración «progresista» en España, porque en otros países sí que existen iniciativas en esta línea.
agosto 24, 2012 a las 2:42 am
Un elemento importante del problema que no refleja casi nadie es el hecho de que la LOE (tal como acaba de interpretarla el Supremo) impide a las familias sin recursos elegir el modelo educativo que prefieran en este aspecto.
Es un apartado relevante que los propios «progresistas» desprecian, sorprendentemente.
Gracias por el post.
agosto 24, 2012 a las 2:45 am
Un elemento importante del problema que no refleja casi nadie es el hecho de que la LOE (tal como acaba de interpretarla el Supremo) impide a las familias sin recursos elegir el modelo educativo que prefieran en este aspecto.
Es un apartado relevante que los propios «progresistas» desprecian, sorprendentemente.
Gracias por el post.
agosto 24, 2012 a las 4:37 am
Molt bona reflexió, Jordi.
La compartiré.
Una abraçada.
agosto 24, 2012 a las 5:24 am
Un millon de gracias por tan claro y certero articulo, contenido y forma un 10.
Es exactamente como pensamos en casa, habra quien no lo entienda, pero hay que decirlo alto y sin tapujos.
Me ha encantado, gracias.
Jaume
agosto 24, 2012 a las 10:53 am
Muy buen post. Enhorabuena.
agosto 24, 2012 a las 12:26 pm
De acuerdo con Álvaro, me he perdido aquí Jordi. Para hacerlo simple, lo lógico y democrático no sería que pidieras de entrada una educación diferenciada pública, por tanto accesible a todos, haciendo que más gente accediera a esa libertad de elección.
agosto 24, 2012 a las 5:27 pm
Llegado al último punto de tu artículo he de decir que tus argumentos son muy buenos y válidos. Todo lo que dices está documentado y expuesto según tus intereses.
La cuestión es que a mí también me gusta ir de vacaciones una vez al año -al menos- con mi familia, lo hago porque me da la real gana, y lamentablemente, no tiene concierto o subvención pese a ser una actividad que no está demostrado que sea «mala» o «peor», ni tampoco «buena» o «mejor», pero yo la considero positiva.
Los colegios pertenecientes a ordenes religiosas en España tuvieron que atenerse a la ley y aceptar la llegada de chicos por un lado, en colegios de monjas; y chicas, por otro, en los de curas.
No se queje de no tener una ayuda económica pública (es sabido que lo que usted paga en esa escuela es suficiente para mantenerla entre todos los progenitores), pagada por todos los ciudadanos, para una elección suya. Aquí la cuestión es bien sencilla: usted lleve a sus hijos donde le apetezca. Pero si donde le apetece llevarles no es una opción universal, plural y solo una parte minoritaria opta a hacerlo (dejando de lado la legalidad), entonces asuma los gastos y contras de hacerlo.
agosto 25, 2012 a las 3:02 am
por fin parece que se debate en sus justos términos este asunto, opino
agosto 25, 2012 a las 4:13 am
Muy acertado el comentario.
Ultimamente viene la prensa llena de este tema y como siempre las familias tendrán que apechugar con lo que les den.
Las tratan como borregos, como si los padres no supieran qué es lo mejor que conviene a sus hijos.
!!Qué den un «cheque subvención» a cada familia segun los hijos que tengan en edad escolar, para que sirva de pago al colegio que mejor les plazca,y según su forma de pensar y creer!!.
Soy abuela del siglo XI.
agosto 27, 2012 a las 11:22 am
@Liam, ir da vacaciones no es obligatorio. En las franjas no obligatorias, los que llevamos nuestros hijos a colegios concertados, tenemos que pagar el 100% de su cuota sin concierto alguno.
Sobre las opciones a escoger, la opción de educación diferenciada es universal, te la recomiendo, si tienes hijos en edad escolarización.
Claro que nos quejamos, no nos gustan las alternativas públicas, por eso creamos otras que se adapten mejor a nuestra realidad, y pagamos el doble que Ud. en muchos casos sin poder ir de vacaciones por ser coherentes con nuestra elección, es cuestión de prioridades.
No dudo que Ud. está a favor del pluralismo, y las opiniones minoritarias, pero tampoco es el caso, en algunas provincias las escuelas concertadas representa el 40% de los alumnos, cómo ve no somos un reducto despreciable.
No le falta información, sino interés por entender al prójimo, a su vecino, a los que piensan distinto,… no tenga miedo, la verdad le hará más libre.
Jaume
agosto 27, 2012 a las 5:34 pm
Lo entiendo perfectamente y comparto la mayoría de las opiniones aquí expuestas, pero una cosa es cierta….no hay dinero y vivimos en un país de «pandereta», el que lo tenga (dinero) mejor para él pués podrá llevar a sus hijos donde quiera y no tendrá que escuchar juicios de valores…no hay dinero para conciertos si con ello relegamos la enseñanza pública a una enseñanza de segunda….hemos vivido una época de «falsas vacas gordas» y ahora no hay quién pague la fiesta…mi hijo va a una escuela pública y en estos dos últimos años ya ha perdido 1 hora lectiva al día, las actividades extraescolares se han disparado hasta el 80% del precio que se pagaba hace 2 años y no me puedo permitir el lujo de salir del trabajo para ocuparme de mi hijo cuando la jornada escolar se acaba….pero seguimos concertando centros privados de lo que no estoy en contra en absoluto pero yo no puedo llevar a mi hijo a un centro de estos….Permítanme que les diga que para mí la enseñanza pública es prioritaria y si ésta fuese de verdad de calidad, si se preparan los centros con los medios adecuados creo que podría haber perfectamente cabida la enseñanza diferenciada, religiones para el que las quiera recibir como formación y extraescolares para todo el mundo, sin necesidad de conciertos…pienso
agosto 28, 2012 a las 2:25 am
La cosa es aún más sencilla. El hecho de llevar a nuestros hijos a un concertado provoca varias cosas: 1. pagamos dos veces educación (una por impuesto y otra por llevarlos a un concertaddo) 2. ahorramos una plaza al Estado. 3. El coste de un alumno en la pública supera los 6.000 euros. 4. Hay más de 80.000 alumnos en escuela diferenciada en España…
¿Y si los padres que llevan a sus hijos a escuelas de educación diferenciada los llevaran a la pública (están en su derecho ya que pagan esos impuestos)? El impacto sería terrible desde varios ángulos: ampliación de líneas, contratación de profesorado, adecuación instalaciones, etc.
Multipliquemos esos 6.208 € de coste por esos 80.000 alumnos y obtendremos el sobreesfuerzo que tendría que hacer el estado. Casi ná. Casi 500 millones de euros.
Lo único que pedimos es colaboración por el hecho de ahorrar un dineral al Estado. Es decir, a todos los contribuyentes.
Recuerdo: yo también tengo derecho a esa educación que pago con mis impuestos. ¿Podría el Estado soportarlo? En serio, ¿somos los malos de la película… o simplemente no hay ni buenos ni malos, sino una manipulación lamentable en contra de una opción legítima?
Y si no fuera legítima o legal, entonces que la prohíban. Mientras lo sea, y mientras generen ese ahorro al Estado, creo que estamos en nuestro derecho a pedir ese concierto.
No voy contra nadie -de hecho estoy encantando de pagar 2 veces por educación- pero que no me llaman ni sanguijuela, ni sexista, ni que por mi culpa la escuela pública tiene las carencias que tiene.
diciembre 30, 2012 a las 10:07 am
Me ha encantado el artículo. Es francamente veraz y moderado. Ojalá se hicieran análisis tan certeros, basados en la realidad, sin esconder las propias convicciones y respetando las de los demás.
Yo también he estudiado en un centro de educación diferenciada. No me gustó. Pero no por ello puedo juzgar a los que tienen una buena experiencia.
Pienso que no es baladí la cifra que los colegios concertados ahorran al estado: y no pienso que haya que conformarse con pagar dos veces por la enseñanza de nuestros hijos.
En esta España apolillada, el primer paso para una educación de calidad sería dejar en paz a Franco y mirar hacia el futuro. El segundo, no hacer demagogia semántica ni perder tiempo en batallas ideológicas. Los padres son los que, libremente, tienen que poder elegir la educación de sus hijos.
Gracias por el artículo, que difundiré.
enero 18, 2014 a las 6:29 pm
Hola Jordi!
Desde el punto de vista teórico tus argumentos son inatacables. Es difícil probar que la educación diferenciada por sexo sea peor, en sí misma, que la no diferenciada. No obstante entiendo que cuando hablas de tu experiencia personal como ejemplo exitoso de educación diferenciada (cito) «He estudiado 12 años en un colegio privado de educación diferenciada situado en una de las zonas más conflictivas de Barcelona y que durante los años años 80 fue un auténtico polvorín.», haces un poquito de trampa, y te lo digo como compañero tuyo que fui. Supongo que si citases el centro e hicieses una pequeña referencia de su orientación un lector casual, que los habrá, (yo he llegado aquí, directamente a esta entrada de tu blog por una rocambolesca casualidad, aunque tú no lo creas) tendría una visión un poco más completa y a lo mejor, sólo a lo mejor, llegaba a la conclusión que el modelo de eduación diferenciada por sexo lleva, en la mayoría de los casos, peajes asociados (y no sólo económicos, aunque eso es otra guerra) que a lo mejor no quiere pagar. De la misma manera das a entender, de una manera no del todo justa, que la alternativa al centro donde estudiamos era catastrófica («un barrio que era un polvorín»). Siempre quedará la duda de si te hubiera ido mejor en la enseñanza no diferenciada, pero me tendrás que conceder que casi con absoluta seguridad en secundaria hubieras disfrutado un profesor/a de inglés que conociera un mínimo el idioma y eso no es opinable. Por último sólo recordar que la educación diferenciada no está prohibida ni se quiere prohibir, como podría pensar algún lector despistado, sino simplemente dejar fuera del concierto.
Ya me he liado, así de ocioso estoy, y he leído tu extenso análisis de «La carretera» que me ha dejado un poco a cuadros. No la tengo fresca (es una lectura de hará unos tres o cuatro años) y no he visto la película. A mí me dejó la terrible duda de no saber si estaría a la altura si la vida me pusiera a prueba. Me convertiría en un depredador? Me aferraría a la vida? Tendría esperanza en un mundo sin esperanza? Daría a mi hijo una muerte rápida si hubiera de dejarlo solo en ese mundo sin esperanza? Había escrito algo más, pero se me acaban los caracteres permitidos. No he escrito este comment para que aprezca publicado. Sólo quería saludarte y se me ha ido la pinza. Un abrazo,
enero 30, 2014 a las 7:47 am
De acuerdo al 100%. Y no estaría mal que se abriera algún colegio público de ducación diferenciada para ver el resultado. Ah, no soy del PP ni del Opus, vaya por delante….